Todo vale

Se puede decir más alto pero no más claro: la ambición del Alcalde es conseguir los Juegos Olímpicos. Este proyecto marca toda su agenda, las obras, las infraestructuras.

Presentar Madrid como una ciudad atrayente para el turista parece ser la prioridad máxima. El Centro de Madrid se llena de museos y, por tanto, de turistas. Cuantos más turistas por la zona, menos servicios al ciudadano: el exceso de turismo concentrado en una pequeña zona encarece el precio de los locales, haciendo que cualquier éstos sólo resulten viables para negocios hosteleros o de compra impulsiva.

Y en esta carrera hacia no se sabe muy bien donde, Gallardón nos atropella a todos. Todo vale, con tal de conseguir su objetivo: depredar Madrid para el turista, llenarlo de hoteles y museos, despojar a los ciudadanos de las más elementales dotaciones sociales.

Ni una biblioteca, ni una sola Escuela Infantil, parece ser el lema. Sólo museos y fundaciones para construir este gran escaparate que es Madrid. Una ciudad de mentira en la que el turista es el invitado de honor. Para el Alcalde cualquier guiri con chanclas es más importante que los ciudadanos. Él está de paso, sabe que se marcha: 2016 es su gran baza.

Instalar centros de información al turista en los pocos rincones que aún quedan y que podrían ser dotaciones para los ciudadanos. Depredar lo depredable, lo poco que aún queda. Sólo en esta línea se comprende que el Albergue “El Don de María” se haya cerrado para ser sustituido por otro punto más de información al turista.