Centrodemadrid

Señores que sueltan globitos

Posted in crisis, gallardón, madrid by centrodemadrid on octubre 15, 2010

Un año después de aquella ruidosa pesadilla de Madrid 2016, que  afortunadamente, se saldó con el fiasco que puso fin al disparatado delirio de Gallardón, a varios miles de kilómetros, concretamente en Nueva York, los habitantes de aquella ciudad se sobresaltaron al ver cómo flotaban en el aire unos extraños objetos no identificados: se trataba de unas esferas de color amarillo que volaban entre los rascacielos de Manhattan.  

Cuando la comunidad ufóloga de Estados Unidos ya se había prestado a todo tipo de conjeturas sobre una posible invasión alienígena, se supo que, en realidad, aquellos objetos no eran sino globos, que el delegado de Economía del Ayuntamiento de Madrid (Miguel Ángel Villanueva) fue a soltar a Nueva York, como parte de una campaña de promoción turística de Madrid, para festejar el 100 aniversario de la Gran Vía.

Es llamativo ver cómo en la ciudad mas endeudada de España, donde a uno le fríen a multas y a tasas, donde a uno le niegan los servicios elementales que le prestaría cualquier otro Ayuntamiento (en Centro llevamos más de dos años sin polideportivo), donde incluso peligra el mantenimiento de lo más esencial (como la limpieza de nuestras calles o el sueldo de nuestros policías), insisto es curioso ver cómo esa deuda  8.000 millones de euros no les quema en las manos como una bomba,  y lo más sorprendente es cómo esos señores de corbata aún tienen el cuajo, con la que está cayendo, de coger un avión a Broadway a soltar globitos para festejar el aniversario de la Gran Vía.

 Y claro, los neoyorquinos, pasmados. Se ve que no están acostumbrados a estas marcianadas.

No podían ser más inoportunas

Posted in gallardón, madrid by centrodemadrid on May 31, 2010

Hace más de un año dediqué un post crítico a la iniciativa de Gallardón de cambiar las papeleras de toda la ciudad por otras más bonitas, cuando entonces había otras necesidades más acuciantes.  

 Como es el Alcalde (faltaría más) hizo lo que creía oportuno y hace algunas semanas han comenzado a cambiar todas las papeleras de Madrid. Las antiguas no estaban nada mal y seguro que aún tenían mucho recorrido. Incluso, cuesta apreciar las diferencias entre unas y otras. Las nuevas costaron 74 millones de euros. Ahí es nada.

Aquí os pongo  las dos  fotos para que comparéis: de las papeleras antiguas y de las nuevas. Os propongo que encontréis las diferencias. Una pista: las diferencias cuestan 74 millones de euros, así que fijaos bien porque seguro que se trata de diferencias importantes.

Nuevas papeleras

Antiguas Papeleras de Madrid

 

Creo que podíamos convertir las nuevas papeleras en el nuevo símbolo de la ciudad, ¿por qué no?

… si son más representativas que el Oso, el Madroño y la Cibeles juntos. Representativas de una época de despotismo, de derroche y sinsentido.

Todos contra el impuesto de la basura

Posted in gallardón, madrid by centrodemadrid on octubre 20, 2009

Nada más de llegar de Copenhague, donde él y su  alegre comitiva de doscientas personas (algunas más que amigas) habían repartido jamones de Jabugo a diestro y siniestro, Gallardón entre el fracaso que pesaba como una losa y  mientras rumiaba unas falsas quejas que pretendían ocultar el frío engaño a la ciudadanía con “eso” de los Juegos, Gallardón volvió a casa, y  nada más aterrizar, se lanzó a exigir a los vecinos un nuevo impuesto disfrazado de tasa.

 Nada más inoportuno: todos hemos sido testigos de ese vivir a todo trapo de él y su comitiva y quién sabe cuántos cargos de confianza (se dice que 1500) pero todo ese joie-de-vivre lo pagamos los ciudadanos mediante impuestos y, cuando éstos no llegan, (simple equilibrio, los gastos superan a los ingresos) se recurre a otras fuentes, como el impuesto-tasa de recogida de basuras.

Imagen tomada de la Fundación Vida Sostenible

Imagen tomada de la Fundación Vida Sostenible

 Esta tasa parte de un error fundamental, de un pecado original, si se quiere: su cuantía no depende del servicio que presta  el Ayuntamiento a cada ciudadano, sino de la capacidad contributiva de cada uno (medida por el valor catrastal de inmueble). La tasa, por su naturaleza jurídica, es una  contraprestación que la Administración recibe por sus servicios. Por tanto, según la Ley, la tasa no puede exceder de coste real o previsible del servicio y han de pagar más quienes más servicios reciban. Y esto es precisamente lo que las diferencia de los impuestos. Los impuestos son aportaciones realizadas en función de la riqueza (capacidad contributiva) de cada uno. El matiz es fundamental: en materia de impuestos, han de pagar más quienes más tienen y esto no ocurre en materia de tasas, donde quienes más pagan son quienes más servicios reciben.

 Dicho esto, la tasa de recogida de basuras  debía haberse fijado en función del servicio que cada uno recibe y no en función de su capacidad contributiva. Es decir, cuanta más basura generes, más tienes que pagar y no cuánto más valor tenga tu casa, más tienes que pagar. Y lo que da una idea más que aproximada de la basura que genera cada uno (y, en última instancia, de cuántas personas viven en una casa y de sus hábitos ecológicos) es precisamente el consumo de agua

 La tasa podría haberse calculado de una manera más justa: el cálculo lo puede hacer hasta un niño de primaria. Se divide el coste del servicio y entre los usuarios (incluyendo administraciones públicas) en función de su respectivo consumo de agua. El consumo de agua da una idea fehaciente de la basura que se genera en cada hogar y de paso se fomentaría un uso responsable de la misma. La conclusión es que el Ayuntamiento parece esencialmente interesado en cobrar, sea como sea, y lo gestiona de manera apresurada, chapucera y poco reflexiva.

 Pero aparte de que la metodología empleada para el cálculo de la tasa carece de fundamento, es más que cuestionable la existencia misma de esta tasa. Bien es verdad que esta tasa tiene parangón en otros países europeos, pero no es menos cierto que, en estos países, los ciudadanos reciben servicios públicos. ¿O acaso el Alcalde pretende que nos comparemos con Holanda o DinamarcaEn estos países la gente paga muchos impuestos (de eso no hay duda), pero éstos sirven para pagar servicios sociales, y a nadie se le niega una plaza en una Escuela Infantil Publica o en un Centro de Día para mayores. En estos países hay instalaciones deportivas públicas. Recibir esta clase de servicios en el Madrid de Gallardón es poco menos que un sueño.

 Madrid se parece más a Versalles que a Holanda.

 Tamaño cúmulo de despropósitos ha cabreado a la ciudadanía en un país donde la clase política estaba falsamente acostumbrada a una ciudadanía abotargad y , resignada. Pero nada más lejos de la realidad. Los españoles somos los toros, parecemos pacíficos y no reaccionamos hasta que algo nos toca los cojones de verdad. Entonces embestimos por sorpresa y hay en la Historia de Madrid suficientes ejemplos que dan fe de los riesgos que para la clase política implica tomar decisiones de esta naturaleza: el motín de Esquilache, por ejemplo, en el que el pueblo se rebeló contra un edicto que vulneraba su privacidad.

 Nadie pudo entonces calcular las consecuencias de algo aparentemente inocuo, pero en una situación de crisis económica, hay pólvora por doquier y cualquier acontecimiento, por nimio que parezca en sí mismo, puede ser una chispa, y ningún acontecimiento, ninguna decisión son separables del “todo”.

Y sin duda, Internet no servirá más que para acelerar este proceso y por doquier circulan ya formularios de impugnación de la tasa.

Esto parece el principio de algo.

Y ahora… ¿Qué?

Posted in Uncategorized by centrodemadrid on octubre 5, 2009
polideportivo de la latina

Este es el aspecto que tiene el polideportivo de mi barrio (Latina). Foto: nosolometro.blogspot.com

Está claro que a Gallardón no le gusta el deporte. Según cuentan algunos medios, jamás ha practicado deporte alguno y en su juventud huía despavorido al ver un balón. Su falta de amor por el deporte se traduce también en un escandaloso abandono de las instalaciones deportivas municipales, de ésas que no son para los deportistas de élite, sino para la gente. 

 Otro de los rasgos que caracteriza a un anti-deportista es no saber perder: echar la culpa a Jacques Rogge de su propio fracaso demuestra una actitud poco deportiva.

Un anti-deportista tampoco sabe jugar limpio: cuando mandó un espía a Río durante la visita del COI a esta ciudad lo demostró, y, sólo gracias a la caballerosidad de Lula no fue descalificado.

 En fin, que se mire por donde se mire a Gallardón el deporte “como tal” no le hace mucho tilín.

 El fracaso de la candidatura de Madrid 2016 nos deja un panorama inquietante de una ciudad con una deuda de 8.000 millones de euros, cuya financiación absorberá gran parte de los recursos futuros que se generen en la ciudad. Nuestro legado post-Copenaghe es el de  un Alcalde enrabietado, y el de una ciudadanía cada vez más cabreada por los crecientes impuestos, por la precariedad de los servicios municipales recibidos y por el despilfarro Versallesco de nuestro Alcalde.

 Tenemos que esperar a que Gallardón digiera el golpe.

 Yo veo tres opciones:

 1)      Que “aterrice” y se ponga a trabajar por la felicidad de sus ciudadanos (para que, por ejemplo, no tengan que dormir al raso para conseguir una plaza de natación, y para que tengan escuelas infantiles y ludotecas, y puedan  desplazarse en bici de sus espacios públicos).Esta opción le daría más opciones para la Presidencia que los Juegos y le tendría también la mar de entretenido, que es lo que quieren sus jefes de Génova.

 2)      Largarse a Génova dejando un agujero astronómico y una ciudad de tierra quemada de la que nadie quiera ni pueda hacerse cargo. Correr es de cobardes

 3)      Seguir al pie del cañón y volverlo a intentarlo para el 2020. En este caso, al igual que para 2016 presumirá de apoyo popular. Ahí es donde los ciudadanos podemos exigir que la calidad de vida en la ciudad mejore y, si no lo hace podemos, entre todos, a través de redes sociales, Facebook, Twiter y lo que sea, dar a conocer al COI y al mundo, y en varios idiomas, por qué no apoyamos esta iniciativa. Nunca he tenido tantas visitas en mi blog como cuando puse de etiqueta Anti Madrid 2016 (hasta un blog alemán enlazó con el mío…). Esto me hace ser optimista y pensar que, por una vez, los ciudadanos tenemos la sartén por el mango: estamos a tiempo de evitar el desastre y de llevar el timón de la democracia. Es decir, que si no se cumple la condición 1, no habrá Juegos en 2020. Tampoco.

Sobre el «Día de la Corazonada»

Posted in Uncategorized by centrodemadrid on septiembre 27, 2009

Hoy se celebra el día de la corazonada. Un macro-evento al más puro estilo Gallardón, que podemos describir desde varios puntos de vista. Desde el punto de vista de los fans consistirá en la posibilidad de ver un concierto gratis total, lo cual supongo que agradecerán en estos tiempos de crisis. Bueno, aunque no es exactamente “gratis”, ya que, por una parte, todos los madrileños pagaremos el caché el triunfito y los que asistan tendrán que sostener a cambio una cartulina para construir una composición del logotipo de la candidatura.

Imagen0016

No todo el mundo quiere los Juegos en Madrid

Desde el punto de vista del Alcalde, será una forma de manifestar el “apoyo popular” a la candidatura de Madrid 2016, que el COI cifra en un 85% de los madrileños. ¿y qué mejor manera de demostrar ese enfervorizado clamor que una mano gigante?.

He leído en varios medios que el apoyo a Madrid 2016 se cifra en un 85 por cien de los madrileños, lo cual me hace pensar si yo seré una freak antisocial o es que lo del apoyo del 85% es un camelo para conquistar las voluntades de los miembros del COI.

Como vecina de esta ciudad desde hace doce años estoy hasta las narices de aguantar interminables e inútiles obras, hace años que vivo inmersa en el polvo, las vallas, el cemento, los andamios, y las calles cortadas. Hace un año cerraron el polideportivo que usaba, el parque infantil que frecuento desaparecerá más pronto que tarde para albergar edificios eclesiásticos,no tengo plaza de escuela infantil para mi hijo ni esperanzas de tenerla, ni biblioteca pública. Pero se supone que,o  tanto yo como las personas que me rodean somos unos raritos (de 15 por ciento de “raritos” que no apoyamos Madrid 2016) o el supuesto apoyo no es más que un invento del llorón Gallardón- tan dado al melodrama-  para ablandar las voluntades de los miembros del COI.

Y si algún miembro del COI está leyendo este blog desde algún rincón del planeta les diré que no se crean del todo ese supuesto apoyo popular. Y que no se dejen engatusar por la foto, que en esta ciudad tan falta de pan y circo  (por «circo» léase, dotaciones, polideportivos, bibliotecas, etc.) hay mucha gente dispuesta a hacer de píxel con tal de oír un concierto gratis. Por eso, cuando hoy en El País me encuentro con este punto de libro promocional lo primero que pienso es “a saber cuánto ha costado esto” lo segundo es “la de cosas que se podían haber hecho con lo que estos irresponsables llevan gastado en montar  estos circos” y lo tercero ya no es un pensamiento, sino una acción, inseparable del pensamiento. y no hay mas palabras, sólo una imagen.

¿Qué clase de justificación es ésa?

Posted in Uncategorized by centrodemadrid on septiembre 15, 2009

Leo en  ADN, que  Alcalde Gallardón, afirma tener «30.000 razones» para realizar muchas de las obras previstas para este ejercicio y esta legislatura en el mismo lapso de tiempo, en concreto, las 30.000 familias que, gracias a estos proyectos, «ahora ganan un jornal».

Supongo que hará extensiva esta justificación a los cientos de cargos de confianza, asesores, altos cargos con sus respectivos chóferes, y a todas las personas que trabajan en la promoción de Madrid 2016 y que gracias a ello, hoy tienen un jornal. Y, por ende, a las constructoras que generosamente hacen eso posible, ya que generan empleo y nos pagan un jornal. bisbi

Un jornal, como el que se ganará Bisbal el 27 de septiembre, en un concierto “gratis”  que pagaremos entre todos (incluso los que preferimos no escuchar su música). Se trata de atraer a una muchedumbre amante de Bisbi y que esté dispuesta a  hacer de píxel para una foto aérea con la que Gallardón tratará de convencer al COI de las muchas personas que  quieren ver Bisbal gratis... ejem…  del «apoyo popular a la candidatura olímpica»  para formar  el mayor mosaico ciudadano jamás realizado en apoyo a la candidatura Madrid 2016”. Guau…

En fin, que todas estas cosas son  para que los madrileños tengamos variados jornales cuya cuantía va desde una peonada hasta el caché del mismo Bisbiahora lo entiendo…

Where are my impuestos?

Posted in Uncategorized by centrodemadrid on julio 10, 2009

Este año en Madrid 30.000 niños de 0 a 3 años se han quedado sin plaza en una guardería pública, escuela infantil o cómo se le quiera llamar.

Esperanza Aguirre prefiere que no se hable de “lista de espera” porque «nadie tiene derecho» a escolarizar a sus hijos de 0 a 3 años. Y, al no existir tal derecho, la Administración no tiene obligación de proveer esta clase de prestaciones a los ciudadanos. En apoyo de su argumento, compara las guarderías a los pisos de Protección Oficial a los que, en definitiva, ningún ciudadano tampoco tiene derecho. En fin, todo este argumentario  nos lleva a la convicción de que, según la postura oficial vigente en Madrid, proveer esta clase de servicios es más un acto de caridad que una prioridad y que, por tanto, tenemos que estar bien agradecidos  y no hacer demasiadas preguntas.

A mí gustaría aprovechar este post para hacer referencia a una serie de cosillas que el Gobierno de Madrid tampoco tiene obligación de hacer (pero que, al fin y al cabo, hace) y, sobre todo, de cuánto nos han costado esas cosillas de nada a nosotros, los ciudadanos.

Caja mágica: 160 millones de euros
Traslado del Ayto a Cibeles: 440 millones de euros
Gastos preolímpicos Fase I: 10, 7 millones de euros
Gastos preolímpicos Fase II: 29,7 millones de euros

TOTAL: 640 millones de euros

El coste medio de construir una Escuela Infantil es de 1,2 millones de euros y su capacidad media de 110 niños.

Si dividimos el total de estos gastos nos salen unas cuentas de lo más chachi. Fijaos: con los 640 millones de nada, se podrían haber construido 533,6 guarderías, lo que daría cabida exactamente a 58.703 niños. El doble de los que no han obtenido plaza. ¿qué significa esto? Que, con la mitad de lo que  han gastado entre el Madrid preolímpico y el nuevo palacio del Alcalde estaría resuelto el problema en Madrid para todos. Pero la realidad es otra: 30.000 familias sin Plaza y me imagino que esto es así por una mera cuestión de prioridades, donde los ciudadanos y sus necesidades cuentan más bien poco. También creo que las 30.000 familias que nos hemos quedado sin plaza en una guardería pública (que, por cierto, son las que tienen las mejores instalaciones) somos personas de clase media y, como tales no reunimos los suficientes puntos para el acceso a la “caridad”. Pero el caso es que también somos –y eso conviene no olvidarlo- las que pagamos más impuestos, cuyo destino tan frívolamente  deciden los dirigentes de Madrid en clara connivencia con las mayores empresas del país.

Estando en un puesto de dos dígitos de una enorme la lista de espera, sin ninguna posibilidad de obtener plaza a uno le acaban dando ganas de que la manita con que nos saluda Gallardón con ese lema en Spanglish “Hola Everyone” sea sustituido por un buen corte de manga con un lema también en Spanglish que diga: Where are my impuestos ?

Javier Marías: «Tengo un razonamiento»

Posted in madrid, Uncategorized by centrodemadrid on junio 1, 2009

Javier_MariasMi admirado Javier Marías publica en EL País Semanal un artículo de opinión con el que no puedo estar más de acuerdo. Se titula «Tengo un Razonamiento«, parafraseando el lema «Tengo una corazonada» con que el Ayuntamiento pretende promocionar la candidatura olímpica de Madrid. En el artículo, Marías carga las tintas contra la irresponsabilidad de nuestros responsables políticos que se empeñan en perseguir afanosamente las Olimpiadas para Madrid, cuando no se preocupan de la calidad de vida de sus habitantes.

La percepción de que los ciudadanos somos un estorbo para las autoridades no la tiene sólo Javier Marías y somos muchos los que la compartimos. Personalmente, no entiendo qué motivación ha llevado al Alcalde a invertir 70 millones de euros en obras innecesarias en el distrito Centro de Madrid, cuando las dotaciones sociales de mismo están muy por debajo de las recomendaciones de la Unión Europea.

Los vecinos del distrito centro no tenemos polideportivos, ni carril- bici, ni escuelas infantiles, ni centros de día para mayores, ni bibliotecas públicas, dotaciones que venimos reclamando con insistencia mientras vemos cómo el Ayuntamiento dilapida el presupuesto de nuestro distrito, no en satisfacer las necesidades de los vecinos (que son muchas), sino en obras sin criterio como levantar y volver a construir las aceras varias veces. Parece que se hayan vuelto histéricos.

Por lo demás, dudo de que la estadística municipal que cifra el apoyo popular a la candidatura de Madrid para las Olimpiadas en un 90 por ciento, sea cierta. Habría que ver en qué términos se ha planteado la encuesta y a qué personas. Porque, sin duda, en los tiempos de restricción presupuestaria que vivimos, pocos dudan de que haya otras prioridades de gasto público. Un ejemplo, la Caja Mágica (que nadie sabe muy bien para quién es y para qué sirve) ha costado 160 millones de euros. Lo mismo que 75 escuelas infantiles.

Cito uno de los párrafos del artículo:

«Todas esas autoridades, si de verdad quisieran una Olimpiada, lo primero que harían sería permitir vivir aquí. Es decir, pasear, respirar, trabajar, descansar, dormir. Dejarnos en paz. Es ya una cuestión de supervivencia: somos nosotros o ellos. Que se vayan ellos, por favor.»

AMÉN

Bienvenido, Mr. COI

Posted in Uncategorized by centrodemadrid on abril 28, 2009

Con 50.000banderolas colgando de las fachadas… al más puro estilo de una peli de Berlanga. Así recibirá Gallardón a los miembros del COI en su visita oficial a Madrid los próximos 4 a 6 de mayo de 2009.  Según dice la página del Ayuntamiento, a los señores del COI  les enseñarán la Caja Mágica, Madrid Arena, y otras hermosuras faraónicas con las que Gallardón, tan amorososamente, ha ido tejiendo la trampa financiera en que se ha convertido esta ciudad. 

Lo que no verán los señores de COI es cuál es la realidad del deporte en Madrid. La realidad de una ciudad demasiado contaminada para ir en bici. Tampoco verán el Polideportivo de la Cebada, que lleva cerrado casi un año, sin que nadie haya invertido un sólo céntimo en acondicionarlo.

La escasa preocupación del  equipo municipal por promocionar el deporte de base contrasta con las obscenas inversiones en proyectos tan delirantes como La Caja Mágica, a la dediqué un post hace algunas semanas.

Y esta falta de cuidado sólo puede explicarse por el desmesurado afán de poder del Alcalde Gallardón y su irrefrenable deseo de medrar a toda costa, codearse con los grandes entre los grandes y llegar algún día a presidir, como no se molesta en ocultar, el Gobierno de la Nación. Igual que un trepa pisotea con tal de llegar lejos, Gallardón -trepa empollón donde los haya- pisotea el bienestar de los vecinos del barrio de Palacio a los que parece especialmente afanado en torturar, cerrándoles el Polideportivo de la Cebada, rechazando su petición de una Escuela Infantil o expoliando el Parque donde juegan sus hijos para llenarlo de edificios eclesiásticos.

Y ahora está dispuesto a embarcarnos a todos en esta trepidante aventura de conseguir los Juegos Olímpicos para Madrid 2016. Sinceramente, no veo que la ciudad rebose de entusiasmo por conseguirlo. Tal vez tendrá que hacer un casting para que unos figurantes agiten esas banderolas con entusiasmo o elegir a los vecinos menos cabreados con su gestión, lo único que me temo es que le va a costar encontrarlos.

Y ahí va el vídeo del inolvidable Americanos para que los voluntarios se vayan inspirando:

Madrid, dime de qué presumes…

Posted in Uncategorized by centrodemadrid on abril 21, 2009

El pasado fin de semana una amiga me contó lo que tal vez había sito la experiencia más fuerte de su vida. Estuvo trabajando en Shangai durante un año en el que recibió la visita de una amiga suya. Desde Shangai fueron a una isla cuyo nombre no recuerdo, llena de resorts y hoteles de cinco estrellas y buenos restaurantes.

 En ese momento  empieza la pesadilla. La invitada sufre  un ataque de apendicitis y la tienen que operar de urgencia en la isla so pena de que derive en una peritonitis y muera. La chica sobrevive pero pasa una interminable semana en un hospital donde nadie habla inglés y las ratas corren por los pasillos como si nada. De recuerdo le queda una cicatriz vertical que parece de broma aunque imagino que a la pobre no le hará ninguna gracia.madrid

La reflexión es la siguiente: en estos países sudbesarrollados que pretenden no serlo, hay un mundo resplandeciente que las autoridades quieren mostrar como si esta cara brillante de la luna fuera la única que existe. Parecen pretender con ello que ese universo de obras faraónicas y lujos sea el único recuerdo que se lleven los turistas cuando vuelvan a sus casas.

Por razones de trabajo durante una época viajé con relativa frecuencia a Estocolmo y el recuerdo que me llevé (lo que más me impactó) fue la cantidad de madres jóvenes que había por la calle empujando sus carritos. También es verdad que las suecas por regla general parecen más jóvenes de lo que son. Pero a mí, acostumbrada a vivir en el centro de Madrid, me parecieron resplandecientes ninfas en un bosque de felicidad.cupula Quizás uno cuando viaja no se lleva de recuerdo más las sensaciones que más les han impactado, lo quieran las autoridades o no.

Y es muy probable que en Madrid la costosísima cúpula “británica” del Ayuntamiento no convierta a los madrileños en unos gentelmen y que, por tanto, la realidad que  esté ahí bien visible incluso para los turistas. Esta España de gente gritona, malencarada, capaz de tantas cosas repugnantes, como escupir u orinar en la calle, tirar las colillas al suelo, hacer botellón en parques infantiles, o no recoger las cacas de sus perros cuando nadie les ve. Nuestro Madrid, con una Administración capaz de gastar millones de euros en una cúpula mientras que en los centros de menores se tortura y maltrata a los chicos hasta llevarlos al suicidio. Con toda impunidad, sin que nadie diga nada, pero todos estemos un poco más tristes.

Y tal vez lo que se lleven nuestros turistas de recuerdo y lo que quede en su memoria no sea la belleza de los lienzos de Velázquez sino la inquietante sensación  de tanta gente malencarada y estresada que pulula por las calles. Y ese picor en la garganta y la piel sucia de tanta polución.

Y tal vez, de cuando en  cuando,  en la tranquilidad de sus hogares los que fueron turistas, acaricien esos recuerdos como la chica de Sanghai acaricia su cicatriz, sintiendo por nosotros la misma compasión que uno siente por los chinos.